Autores/as
Resumen
Cuando hicimos la convocatoria para un libro de artículos de gente que hubiese estudiado antropología con la esperanza de que escribieran lo que quisieran escribir o que escribieran sueltos, elegimos entre tres denominaciones. La que más caló fue un plagio: Nunca un esbirro. En cualquier caso, un plagio homenaje que recuperaba para la convocatoria una frase repetida con su habitual inteligencia por Miguel Rivera Fellner, profesor de antropología en la Universidad de Caldas. No rendirse a los encantos de la medianidad. No estar conforme con ser un seguidor. No ponerse un uniforme para ejercer la violencia con impunidad. Nunca esbirros.